Por la noche me visitan los cuervos,
pues yo soy ese árbol seco,
solitario y aterrador
azotado por el viento
al que poco a poco
se le ha ido escapando la vida
entre crujidos y lamentos.
Tu eres ese hermoso pájaro de color
que durante el día
te posas en mis ramas desnudas
y con tu canto de alegría
alivias mi profunda agonía.
Bellísimo y profundo. Proyecta ese dolor callado que no se deja ver superficialmente.
ResponderEliminarFascinante.
Saludos cordiales.
Los cuervos siempre estarán, el colorines no.
ResponderEliminarHazte amigo de los cuervos.
Saludos.
Opino como Toro. Sin embargo, aprovecha al pájaro ése de color.
ResponderEliminarUn beso o 2 #
Bonito.
ResponderEliminarEl negro también es color.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡¡Siempre quedara algo de lo que fuimos!!..
ResponderEliminarUn poema preciso en color y en b/N..
Me encanta.
un abrazo